Institución Maestro Guillermo Vélez Vélez, donde se escuchan los sueños de aquellos que no oyen
Hace seis años ingresó a este lugar un chico de 19 años, sordo y con una discapacidad cognitiva asociada. En aquel entonces, Nairo Miguel Medina tenía muchas ganas de aprender, pero no contaba con ningún manejo de lengua de señas, por lo que solo se comunicaba con su familia mediante señales y gestos inventados por él, para cubrir sus necesidades particulares.
Hoy, ese joven no solo maneja, completamente, la lengua de señas colombiana, por lo que puede comunicarse con cualquier persona sorda, sino que se ha convertido en un claro ejemplo de que cuando se tiene pasión, dedicación y entrega, no hay obstáculos que impidan alcanzar los sueños.
Luego de estar en la primera etapa de iniciación institucional, en la que los aprendices reciben acompañamiento profesional para descubrir y encaminar su línea de formación, Nairo se interesó en la técnica en Alistamiento de Carga, titulada por el SENA; después, desempeñó su práctica laboral en la empresa Almedic, con excelentes comentarios, y actualmente se alista para tener su diploma de graduación.
“En junio recibiré mi cartón, que culmina todo el proceso de aprendizaje en la Institución Maestro Guillermo Vélez Vélez. Estoy con pensamientos muy positivos de poder encontrar un empleo, de poder mostrar todo lo que aprendí y de poder ser útil a la sociedad, como me lo mostró la Institución”, así lo expresó a través de su intérprete de lengua de señas, Yenny Bedoya.
Oportunidades de formación para el trabajo para la población sorda
Precisamente, esta profesional señala que allí se ofrecen talleres de carpintería, cocina y confección, entre otros, a 12 jóvenes y adultos con tres niveles de discapacidad auditiva, pero aún hay capacidad para atender a otras tres personas más con esta condición y que cumplan además los siguientes requisitos:
- Tener una discapacidad cognitiva o psicosocial, la cual debe estar certificada.
- Vivir en Medellín (puede ser en cualquier comuna o corregimiento)
- Tener entre 14 y 35 años de edad.
Y lo más importante, quien esté interesado en formarse en este lugar debe mostrar ganas de aprender y capacitarse en cualquiera de los programas que se ofrecen, sin restringirse o limitarse por su tipo de discapacidad, pues la Institución se encarga de implementar los ajustes necesarios, como en el caso de la población sorda a la que, en todas las clases, se les brinda acompañamiento con un profesional en servicio de interpretación de señas y, en algunas ocasiones, también de un modelo lingüístico.
Una historia que no se expresa con la voz, sino con el corazón
En pocos días, Nairo Miguel Medina recibirá el diploma que lo acredita como técnico en Alistamiento de Carga y, seguramente, también muy pronto lo podremos ver maniobrando equipos de manejo de mercancías o realizando operaciones logísticas en alguna empresa, y cumpliendo cada vez más sueños, varios de los cuales los descubrió durante su paso por la Institución Maestro Guillermo Vélez Vélez.
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